Cuando en el mes de julio, en el Hotel Maisonnave de Pamplona, se presentó el nuevo recorrido del Encierro de Guadalajara, a muchos se nos pusieron los dientes largos al ver la buena pinta que tenía el encierro, siendo, junto al de Pamplona, el único de capital de provincia con toros de lidia. Este cambio, que hace que toros y mozos atraviesen el Casco Histórico de la ciudad alcarreña, le da al Encierro un sabor y una emoción especiales. Desde 1364 no corrían toros por la Calle Mayor de Guadalajara.
Hoy el nuevo recorrido se ha hecho realidad, con un primer encierro histórico, a la par que bonito y emocionante, también lento y con toro rezagado. Una carrera que ha estado protagonizada por cinco toros de El Capea —recordemos, encaste Murube—, que serán lidiados esta tarde por Alejandro Talavante, Borja Jiménez y Marco Pérez —estos dos últimos sustituyen a Morante de la Puebla y José María Manzanares—.
Sin embargo, no han corrido los seis toros; parece ser que uno no ha salido de los corrales, y también tengo serias dudas de que los cinco que han salido por la mañana vayan a ser lidiados por la tarde, pues el último en entrar al Coso de Las Cruces parecía lesionado. Contemos lo sucedido esta mañana:
Primer Encierro de Guadalajara 2025: El Capea
Puntual, como debe ser, y a una hora maravillosa para un encierro, a las 8 de la mañana ha roto el cohete en el cielo y el portón de los corrales de la Plaza de la Virgen de La Antigua se ha abierto para que la manada saltase al adoquín y accediese al Casco Histórico de la ciudad. A pesar de que sólo cinco toros han corrido el encierro, los bueyes han mantenido su número original, así que con la cabestrada abriendo camino, los once animales han subido la cuesta y llegado al primer contacto con los mozos, muy estirados y con uno de los bureles quedándose desde el principio por detrás.
Alguna miradita sin maldad en ese primer contacto, pero por lo general mucha nobleza por parte de los toros. El último de ellos, el que venía ya con una velocidad más lenta de salida, ha querido meter la cara a la izquierda, y en la intención se ha ido al suelo; quedándose rezagado y en solitario el resto del recorrido para disfrute de los mozos. Pocos corredores en estos primeros metros y la mayoría de los que había han tenido que correr delante de la cabestrada hasta que se ha caído este morlaco.
A lo largo de la Calle Mayor, la manada se ha abierto, permitiendo a los mozos entrar en la cara de los morlacos. Así que teníamos a tres bueyes y burel abriendo camino; a una pequeña distancia, pero la suficiente como para entrar a correr, les seguían tres bueyes y tres toros; y cerrando, a bastante distancia, el toro rezagado.
Con esta conformación de la torada, los corredores han empezado a disfrutar mucho del encierro. Hemos visto auténticas maravillas de carreras, sobre todo de los mozos que han entrado por la parte izquierda de la calle, pues por la parte derecha, los cabestros tapaban más los huecos y dificultaban la labor. Carreras largas y bonitas con los primeros toros.
De dulce ha estado un joven corredor de San Sebastián de los Reyes por el centro de la calle con el burel rezagado. Carrera con clase, con temple y con gusto; a la distancia perfecta. Preciosa. Pronto se ha sumado a esa carrera otro joven de camiseta blanca, con el mismo gusto y la misma clase. Por cierto, ambos habían corrido previamente con los de delante muy bien también.
Mientras este joven realizaba esa carrera con el último de los toros, otro joven hacía lo propio con el primero de ellos, que en esos momentos estaba tomando el liderazgo de la carrera. Carrerón sumamente bonito, también por el centro de la calle. Ni siquiera este primer toro llevaba una excesiva velocidad, así que el mozo ha podido gustarse a placer.
Según avanzaba el encierro, la cantidad de mozos se multiplicaba, también las carreras y, como es habitual, las caídas. Y eso es lo que hemos visto en Capitán Arenas: mucha afluencia de corredores —tanto locales como llegados desde muchos puntos del país—, buenas carreras y también caídas con efecto dominó por el lado izquierdo de la calle.
Así se han presentado en la Plaza de Toros: los cuatro primeros toros casi a la vez que la cabestrada en poco más de dos minutos, y unos segundos después el toro rezagado. Este toro ha estado más de cuarenta segundos paseándose por el ruedo, sin causar problemas, pero sin terminar de decirse a entrar en chiqueros. Además, ha llegado algo mermado y con una herida en la axila izquierda. Veremos si puede ser lidiado esta tarde. Además, uno de los corredores ha sido trasladado al hospital por traumatismo.
Así ha concluido el primer encierro de Guadalajara 2025. Un encierro histórico que volvió a la Calle Mayor, emocionante y bonito, en el que sólo han corrido cinco toros de El Capea. Mañana más. Suerte a todos.