Caídas, sustos, imprudencias, milagros y buen correr en el tercer encierro de San Fermín 2024
En la mañana de este martes 9 de julio, los toros madrileños de Victoriano del Río han protagonizado el tercer encierro de San Fermín 2024. En su decimotercera participación en Pamplona, el encierro ha estado marcado por la gran masificación de corredores. Habrá quien diga que el encierro ha sido limpio porque sólo ha habido dos traslados por contusiones faciales, pero, nada más lejos de la realidad; ha habido una gran multitud de caídas y montones, poquita limpieza hoy.
Siempre digo que el encierro de estos toros es complicado de correr por lo veloces que son y lo que exigen a los corredores, pero no deja de ser menos cierto que suelen demostrar mucha nobleza en la calle. Hoy, se ha repetido. Se han comportado mejor los toros que los mozos, ya que, un día más, se han vuelto a cometer demasiadas imprudencias y, de nuevo, demasiada gente parada en los laterales. A pesar de todo, se han visto excelentes carreras. Vayamos por partes:
El Encierro de hoy
Puntual como un reloj suizo, a las 8 de la mañana, el cohete rompía el cielo pamplonés para dar comienzo al tercer encierro de las fiestas. La cabestrada ha reaccionado rápido al chupinazo y en menos de dos segundos han saltado al asfalto para imponer su imponente ritmo a la carrera y mandar en los toros. En la misma hornacina se han sucedido las primeras caídas de mozos.
Complicado correr con toro en Santo Domingo. Allí, carreritas laterales con los toros o carrerones delante de los bueyes, pero poco más ha podido hacer la buena gente de La Cuesta en este tercer encierro. Eso sí, los toros ni un mal gesto, ni una miradita, nada de nada, ni allí abajo ni a lo largo de todo el recorrido.
Al final de la calle sí hemos visto a un corredor ponerse delante del toro burraco, “Cantaor”, nº 118, el cual iba primero. Este mozo le ha hecho una preciosa carrera hasta casi la mitad de la plaza consistorial, donde otro mozo ha tropezado delante de él y le ha impedido poder continuar. Eso sí, muy meritoria esa carrera aprovechando el único huequecito que ha habido en ese tramo.
Como un rayo ha pasado la estirada torada liderada por la cabestrada por el Ayuntamiento, y así han enfilado Mercaderes, donde al abrirse un poco los toros a la derecha los habituales del tramo han aprovechado para firmar breves y buenas carreras. En la segunda parte de la calle, “Cantaor” se ha igualado por la izquierda con el primero de los bueyes y se han visto más carreras vibrantes.
Imprudentes en La Curva
No aprendemos, los humanos no aprendemos, y si ayer el de la chaqueta azul se llevó un gran susto en La Curva, hoy han sido cuatro los imprudentes que se han quedado parados en el mismo sitio, justo en el exterior. Por fortuna para ellos, los bureles no han chocado esta mañana con el vallado ciego. Los toros han frenado a tiempo, para coger Estafeta sin apenas rozar la pared. Lo dicho, no aprendemos y estos participantes han tenido el día de suerte.
Estafeta: demasiadas caídas, muchos montones y buenas carreras.
La manada se ha estirado muchísimo al comienzo de la calle más popular de Pamplona. La conformación de la manada en los primeros compases era la siguiente: abriendo un buey, detrás dos toros encabezados por “Cantaor”, pegados llevaban un buey y otro toro, luego otro buey con otro toro, tres bueyes más y los dos últimos toros. Todos en fila india. Pero esta formación ha durado poquito porque se han ido sucediendo muchos avatares, caídas y montones por el camino. Desgranemos:
Tal cual ha comenzado la carrera en esta calle, se han comenzado a caer mozos al suelo. En su grandísima mayoría, sin ser arrollados por los toros, casi podríamos decir que o han sido arrollados por otros mozos o, en su defecto, obstaculizados por otros participantes. Alguno ha tropezado, pero también los ha habido que han perdido el equilibrio a base de empujones de otros mozos y de tirones en sus camisetas.
Demasiada gente parada que no deja correr. Esto ha provocado que, entre los parados, los que quieren salir a ponerse en las astas desde el lateral, los que pelean por entrar, los que quieren quitarse despavoridos viendo la velocidad endemoniada de los astados y los que inevitablemente tropiezan, se han comenzado a formar montones desde los primeros metros de la calle a ambos lados de la calle, siendo algunos de tamaño considerable.
“Cantaor” tropieza y se abren los huecos
Un mozo de blanco ha caído en el centro de la calle, “Cantaor” que en ese momento, hablamos de mucho antes de llegar a la Bajada de Javier, iba en paralelo con el primer buey y le estaban haciendo buenas carreras, ha tropezado con uno de los mozos caídos y ha perdido las manos. A pesar de que se ha levantado raudo y veloz, ha perdido el liderazgo, pasando a ser desde ese momento el segundo de los toros.
El tropiezo de “Cantaor” ha supuesto que el primer buey se distanciara del resto y se abriera un valioso hueco donde correr cuatro toros. Hueco que ha sido muy bien aprovechado por corredores que les han recetado buenas carreras. Mientras, se seguían produciendo caídas y más caídas. Por detrás, los dos últimos toros, “Toledano” y “Aturdido”, se han ido descolgando del resto y se ha abierto otro hermoso hueco que ha sido excelentemente aprovechado por mozos que nos han brindado preciosas carreras.
Más caídas y más carreras.
Pasada la Bajada de Javier, un corredor con experiencia, que iba firmando una estupenda carrera delante del primer toro, se ha visto desbordado por la velocidad que imprimía el de Victoriano. El morlaco lo ha arrollado para quitárselo del medio pero sin hacerle caso y el mozo ha sido pisoteado por varios de los animales que venían por detrás.
Como un efecto dominó, se han sucedido varias caídas de corredores por el centro de la calle que han supuesto que un buey cayese y también el cuarto de los toros de ese primer grupo. La cara de este morlaco ha quedado pegada a la espalda de un mozo en el suelo. Seguramente el hecho de que estos toros estén tan entrenados para correr hermanados ha hecho que cada vez que perdían las manos o se caían buscaran rápidamente cómo alcanzar a sus hermanos sin liarla. Se iban sucediendo los milagros, uno tras otro según se avanzaba por Estafeta.
A pesar de todas estas dificultades y complicaciones, muchos han sido los que han podido disfrutar de buenas carreras en este tramo de Estafeta. Han volado delante de las astas de los buenos de Victoriano y nos han regalado auténticas maravillas de carreras. Desgraciadamente, más de uno, después de muchos metros con el toro en las espaldas ha terminado en el suelo o en algún montón. Mañana difícil hoy.
Caos, pelea y maestría en el final de Estafeta
Con esta tónica hemos llegado al final de la calle más popular de Pamplona. Ahí la pelea y el caos se han intensificado. Hoy había más corredores con ansias de toros que los días de atrás y la pelea ha sido brutal. Un mozo ha caído en la cara de los primeros toros y estos han aprovechado para irse a la derecha antes de salir de esta maravillosa calle. No es frecuente ver esto y ha puesto en apuros a buenos corredores.
En todo este lío de agarrones, empujones, mozos cruzándose, unos queriendo entrar, otros queriendo salir, bien porque se han visto desbordados o bien porque la cabeza no les ha funcionado, al final sólo uno ha conseguido ponerse delante de los primeros toros. ¡Oh, sorpresa! El mismo corredor navarro de todos los días. Es lo que tiene tener las ideas claras, las piernas, el corazón, la decisión y verlo muy claro siempre. Bueno, también tener un pelín de suerte y que nadie te estropee la entrada en carrera, que los hay y no pocos.
Este mozo no sólo se ha colocado delante de los toros, sino que lo ha hecho con el brazo y el periódico atrás y con una buena distancia, sin necesidad de ser encimista puesto que el resto de mozos estaban a otras cosas. De esta forma nos ha ofrecido una verdadera obra de arte en forma de carrera marca de la casa hasta el mismo centro del ruedo. Un día más ha vuelto a brillar en el último tramo.
Sustos, más caídas e imprudentes en Telefónica
Pero, durante unos momentos no ha ido solo y han pasado más cosas: En la primera parte de Telefónica, otro joven corredor se ha unido a su carrera por el lado derecho. El mozo lo estaba haciendo muy bien, hasta que en la curva ha tropezado y ha caído en la cara de los morlacos. Estos, hoy también, han hecho un recto, y “Cantaor” se ha ido contra la gente que estaba parada en el vallado derecho. Insisto, y repito, hay que correr, es muy peligroso quedarse parado, y más en este punto tan crítico del recorrido.
Estos mozos han librado las cornadas porque el de Victoriano no tenía ninguna mala intención y porque San Fermín les ha echado un gran capotico, puesto que han tenido pegados al cuerpo los pitones de “Cantaor”. Mientras, en el lateral izquierdo, hemos tenido una gran marea de personas paradas o que intentaban avanzar sin éxito.
Previamente a esto, hemos visto cómo un participante, un “pata”, estaba parado en el lateral derecho grabando con su teléfono móvil a los toros. No contento con eso, les ha tocado cuando han pasado y ha corrido detrás de los bueyes para grabarles. Lo peor, que no fue el único, más adelante otro mozo “corriendo” móvil en mano termina cayendo en la Bajada. Anteriormente, también personas con móviles en Estafeta. Espero que les haya caído la correspondiente multa económica.
San Fermín y su capotico, toda la mañana al quite
Los sustos no se han quedado ahí. Como “Cantaor” ha perdido tiempo en la curva de Teléfonica con las personas paradas, sólo dos toros iban por delante. Concretamente, “Poco Sol” nº 99 y “Campanilla” nº 179 con 620 kg de peso. Estos toros iban perfectamente guiados por el corredor que hemos citado anteriormente. Cierto es que en la curva les ha perdido un poco el sitio y se ha metido algún mozo brevemente por el medio, pero ha sido poco tiempo.
Cuando este corredor estaba enfilando la Bajada al Callejón con los toros, un mozo se ha cruzado por delante de los bueyes desde la izquierda y ha empujado al corredor hacia adelante para meterse en la cara de los toros. La maniobra le ha durado menos que nada. Se ha topado con varias personas paradas en el vallado derecho y con algún mozo caído por tropezar con ellas, formando un pequeño montón.
El corredor que venía con los toros desde Estafeta ha conseguido pasar con habilidad, maestría y decisión. Sin embargo, el mozo que intentaba meterse en ese hueco ha tomado la peor decisión posible.
Ha estirado los brazos para intentar subirse al vallado, pero no estaba pegado a él. Así que “Poco Sol” lo ha llevado por delante, empujándolo contra las personas que estaban paradas o caídas.
San Fermín no le ha echado un capotico, le ha echado un capotazo de los grandes. El pitón derecho de “Poco Sol” se ha quedado enganchado con el mozo, obligando al toro a bajar más la cara de lo habitual para poder continuar su carrera. En ese proceso, el cuerno le ha pasado por las piernas, el vientre, el pecho… pero, por suerte, el mozo ha librado la cornada. Una mañana de milagros teníamos.
Montón en la Bajada al Callejón
Cuando “Poco Sol” ha continuado su camino, se ha empezado a formar un montón en la parte izquierda de la Bajada, justo antes del túnel. Un montón en el que han caído grandes corredores, que, por suerte, ningún toro de los que faltaban por pasar se ha percatado de él y que al final no ha tenido ninguna consecuencia.
La Bajada cada día está más masificada y son centenares de personas las que todavía han atravesado ese punto cuando los toros ya habían pasado. Más de un minuto en la que un río de gente ha estado pasando sin toros mientras se intentaba deshacer ese montón. Por momentos ha parecido la plaza consistorial en un seis de julio.
Más imprudencias en el Callejón y en la plaza
Mientras el corredor navarro, que hemos citado antes, ha pasado por el callejón con los toros a su espalda, una moza ha caído al suelo y ha cometido tres imprudencias: La primera antes de meterse en el recorrido, pues llevaba una riñonera colgando. La segunda imprudencia ha sido levantarse sin esperar a que terminen de pasar los astados y la última, posiblemente la más grave, lo ha hecho sin mirar atrás en ningún momento. También ha tenido el día de suerte esta joven.
El domingo decíamos que había muchos “patas” en la plaza de toros, hoy otro pata con gorra y gafas de sol también ha tenido la mañana de suerte. En lugar de abrirse en abanico, se ha cruzado hacia en centro de la plaza a saber por qué, medio andando medio corriendo. Ahí un toro le ha sorprendido y el imprudente se ha caído de culo al suelo. Supongo que de la impresión de ver al burel.
De esta forma ha concluido el tercer encierro de las fiestas de San Fermín 2024. Un encierro muy rápido y caótico en muchos momentos, debido a la gran cantidad de personas caídas en el suelo o en montoneras. Una complicada mañana de martes en la que, milagrosamente, sólo ha habido dos traslados por contusiones. Una última cosa, hoy de nuevo demasiadas personas apoyadas en los lomos y tocando a los toros, algunos incluso los cuernos. Por favor, respeten.
Lo cuento de otra forma y más resumido aquí.
Vídeos
A continuación, vídeos del tercer encierro de San Fermín 2024 y del encierrillo de ayer con los toros de Victoriano del Río. Al final del todo, podrás encontrar el vídeo del directo en la previa del encierro donde analizamos el encierro del día y las corridas de toros que llevamos hasta la fecha.
Ver esta publicación en Instagram
Vídeo del encierrillo de ayer 8 de julio con toros de Victoriano del Río.
Ver esta publicación en Instagram
Directo desde la Bajada al Callejón en la previa del tercer encierro de San Fermín 2024.
Ver esta publicación en Instagram
